Bueno, pues fue un finde inmenso con los amigos de toda la vida. Lo dimos todo, y echamos el resto.
El sábado amanecí a las ocho de la mañana, y no fui el último...
Fin de semana brutal.
Cambiamos de tercio, y mañana partimos rumbo al departamento del Tarn y Garona, a disfrutar de esos pueblos idílicos con otras tres parejas de la cuadrilla.
A cada nuevo viaje por esas tierras, más prendado me quedo de ellas.